Las declaraciones de Guterres se producen una semana después del devastador seísmo que sacudió Turquía y Siria, lo que ha dejado hasta el momento, más de 35000 muertos. “Una semana después de los devastadores terremotos, millones de personas en la región luchan por sobrevivir, sin hogar y con temperaturas heladoras. Estamos haciendo todo lo que podemos para cambiar esto, pero hace falta mucho más”, dijo Guterres a los periodistas.
Aunque los países de todo el mundo han brindado las ayudas humanitarias a los afectados por los terremotos, Siria sufre una mayor catástrofe debido a las sanciones ilegales impuestas por el Occidente que dificultan la llegada de ayudas a este país.
Entre los países donantes, Irán ha enviado aviones con rescatistas y equipos médicos, tanto a través de las fronteras terrestres como por aire, una ayuda que continúa en un volumen mayor. Asimismo, China ha enviado un avión cargado con suministros humanitarios.
El Gobierno de México ha anunciado que donará 6 millones de dólares a las víctimas del mortal terremoto en Siria, por medio de la Organización de las Naciones Unidas. A su vez, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, también ha expresado la disposición de su país de brindar ayuda humanitaria, en una llamada telefónica con su homólogo sirio, Bashar al-Asad.
Más de 35.000 muertos en Turquía por sismo; 3.700 en Siria
El presidente turco Recep Tayyip Erdogan anunció el martes que más de 35.000 personas han muerto en Turquía como resultado de los terremotos y en la vecina Siria se han confirmado casi 3.700 muertes.
Entre tanto, señaló que 47.000 edificios, que contenían 211.000 viviendas, habían sido destruidos o estaban tan dañados que era necesario demolerlos.
También, Siria subsiste una situación grave, donde el Ministerio de Salud sirio anunció un conteo final de 1.414 decesos y 1.357 heridos en zonas que están bajo control del gobierno.
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