Torkaman efectuó estas declaraciones en la 48ª sesión ordinaria del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que comenzó el 13 de septiembre y concluirá el 8 de octubre de 2021.
Siete décadas de crímenes cometidos por el régimen sionista contra Palestina son el resultado de la indiferencia de la comunidad internacional para enfrentar tal injusticia, que es la más trágica de la historia, dijo.
El hecho de que un régimen tan malvado, cuya formación ha dependido totalmente de la ocupación, masacre, terrorismo, violación y agresión, se atreva a hacer un mal uso del Consejo de Derechos Humanos para decir mentiras es un claro ejemplo de normalización de la maldad y la malicia, dijo en respuesta a las afirmaciones infundadas hechas por el régimen sionista contra la República Islámica de Irán.
Hoy, es hora de que el Consejo de Derechos Humanos reconozca una vez más la realidad con respecto a la continuación de los crímenes por parte del régimen de Israel y sus políticas de apartheid, dijo, y añadió que la “realidad” es lo que se dijo en la Resolución 3379 que se señaló en noviembre 1975: “El sionismo es sinónimo de racismo”.
El enviado continuó enfatizando que solo un sistema de apartheid y racista puede mostrar un comportamiento brutal hacia niños inocentes y arrestarlos.
Esos niños son culpables únicamente por arrojar piedras con sus pequeñas manos al cruel monstruo conocido por su ocupación y agresión, señaló.
La razón detrás de la continuación de estos crímenes es la indiferencia de la comunidad internacional durante 75 años hacia esta injusticia, subrayó.
El apoyo de ciertos estados, incluido Estados Unidos, ha permitido que el régimen se sienta inmune a las secuelas de sus crímenes.
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