Anoche, el embajador ruso en Naciones Unidas, Vassili Nabenzia, expuso en una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad el móvil de las recientes decisiones del presidente Vladimir Putin, informó la agencia cubana Prensa Latina.
Kiev no solo volvió muy rápidamente a la retórica militar y continuó el bombardeo de civiles, sino que también hizo todo lo posible para destruir los Acuerdos de Minsk, los cuales piden un cese de las hostilidades en la región del Donbass, indicó.
En ese sentido, subrayó la necesidad de defender las regiones separatistas de lo que calificó como una agresión de Ucrania.
Según expresó Nabenzia, no van a permitir un nuevo baño de sangre en el Donbás, que está al borde de una aventura militar, como ya sucedió en 2014 y 2015.
Además, aseguró que existe entre los países occidentales un pánico infundado sobre una supuesta invasión rusa a Ucrania.
Putin escuchó la opinión de los parlamentarios y miembros del Consejo de Seguridad de Rusia y actuó en consecuencia, dijo el embajador sobre la decisión del mandatario de reconocer la independencia de las autoproclamadas regiones autónomas de Donetsk y Lugansk.
Asimismo, el presidente ruso anunció que enviará fuerzas al territorio separatista para garantizar la paz.
La representación de Estados Unidos y sus aliadas potencias occidentales condenaron en el Consejo de Seguridad de la ONU esta acción y se refirieron a la posibilidad de imponer más sanciones a Moscú ante los recientes sucesos.
El embajador de India ante Naciones Unidas, T.S. Tirumurti, manifestó gran preocupación por el aumento de la escalada y pidió contención.
Por su parte, la representación de China hizo un llamado a resolver por las vías diplomáticas el conflicto en Donbass.
La secretaria general adjunta de la ONU para Asuntos Políticos, Rosemary DiCarlo, consideró que las próximas horas y días serán críticos, en tanto urge evitar a toda costa el riesgo de un conflicto mayor.
DiCarlo mostró desaprobación ante la decisión de Moscú de reconocer la independencia de Donetsk y Lugansk, y por el despliegue de fuerzas rusas en esas áreas.
Después de que Putin reconociera la independencia de las autoproclamadas regiones autónomas de Donetsk y Lugansk, Ucrania solicitó la víspera una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad, petición a la cual se sumó Francia en calidad de miembro permanente de esa instancia.
Según fuentes diplomáticas, los países aliados de Estados Unidos (principalmente Reino Unido, Francia, Irlanda, Suecia y Albania) no han logrado hasta ahora sumar el apoyo de otras naciones no europeas en el Consejo de Seguridad en su postura frente a Rusia.
La víspera, el secretario general de la ONU, António Guterres, llamó a una solución pacífica del conflicto en el este de Ucrania, de conformidad con los Acuerdos de Minsk, como lo aprobó el Consejo de Seguridad en la resolución 2202 de 2015.
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