El estrecho de Taiwán subsiste una escalada de tensiones entre Pekín y Taipéi, con nueve aviones militares chinos cruzando la línea media del Estrecho en las partes norteñas, centrales y sureñas en cinco grupos de patrulla.
De acuerdo con el Ministerio de Defensa Nacional de Taiwán, las Fuerzas Armadas de la isla han “seguido y respondido a la situación con nuestros medios sin una escalada” de la situación. No obstante, la Administración china ha aseverado que no reconoce el concepto de “la línea media del Estrecho de Taiwán”, ya que, considera a la isla como parte de una “China única” y destinada a la “reunificación” con la República Popular China.
Esto se produce después de que la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Mao Ning, en una rueda de prensa celebrada este viernes, volviera a denunciar el viaje de la presidenta taiwanesa, Tsai Ing-wen, a los Estados Unidos, dando énfasis en la negativa de Pekín a cualquier forma de interacción oficial entre Washington y Taipéi.
“Se ha vuelto a demostrar que el viaje informado no es tanto un ‘tránsito’, sino un intento de buscar avances y propagar el cese del sionismo de Taiwán. Quiero enfatizar que, independientemente de lo que digan y hagan, las autoridades de Taiwán no pueden cambiar el hecho básico de que Taiwán es parte del territorio de China. Ningún individuo o fuerza puede impedir que China logre la reunificación nacional”, indicó el vocero chino.
La dignataria taiwanesa abandonó Taipéi este miércoles para hacer un viaje de 10 días a Belice y Guatemala, que también incluyó dos escalas en Nueva York el 30 de marzo y tiene previsto viajar a los Ángeles el 5 de abril. En respuesta a la gira diplomática de la alta carga taiwanesa, Pekín ha amenazado con “contraatacar”, si la dignataria en cuestión se reúne con el presidente de la Cámara de Representantes de EE.UU., Kevin McCarthy.
A este respecto, el país asiático ha advertido repetidamente a la Casa Blanca que los funcionarios estadounidenses no se reúnan con Tsai, ya que Pekín considera el acto como un apoyo al deseo de Taiwán de ser visto como una isla soberana.
No obstante, Washington ha tratado de restar importancia a la visita, señalando que Tsai sustuvo reuniones con miembros del Congreso durante sus viajes anteriores. La presidenta ha realizado seis viajes a EE.UU. durante su mandato, entrevistándose con miembros del Congreso y miembros de la diáspora taiwanesa.
Las tensiones entre China y EE.UU. están a su nivel más alto en los últimos años, entre otras cuestiones, por el apoyo estadounidense a la secesión de Taiwán en actividades como la venta de armas y las visitas de funcionarios norteamericanos a la isla que Pekín considera parte inseparable de su territorio, bajo el principio de ‘una sola China’.
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