En esta congregación, los heridos de los ataques químicos del régimen de Saddam equipados por el régimen alemán durante la guerra impuesta 1980-1988, así como las familias de los mártires iraníes condenaron los actos injerencistas y poco convencionales del gobierno alemán durante los violentos disturbios en Irán.
Al final de esta reunión, se leyó una declaración contra las hostilidades de los países occidentales durante los recientes acontecimientos en Irán.
La ministra de Asuntos Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, ha anunciado nuevas restricciones contra el pueblo iraní más allá de las sanciones que la UE ha impuesto contra Teherán.
Repitiendo acusaciones tendenciosas e infundadas de los líderes europeos, Annalena Baerbock, siguió apoyando a las autoridades occidentales por los recientes disturbios en Irán y afirmó que las relaciones con Irán no pueden continuar como de costumbre.
El pasado 27 de octubre, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán convocó al Embajador de Alemania en Teherán, Hans-Udo Muzel, en reacción a la posición intervencionista de la ministra alemana de Exteriores.
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