“Conmocionado y preocupado por los informes de que la policía de Irán ha agredido a Armita Geravand, de 16 años. Estamos siguiendo noticias de su estado. Seguimos apoyando al valiente pueblo de Irán y trabajando con el mundo para responsabilizar al régimen por sus abusos”, alegó Abram Paley en su cuenta de X.
“El arresto de la reportera Maryam Lotfi mientras investigaba esta agresión también es inaceptable y una afrenta a las libertades periodísticas. El régimen iraní debería dedicar más tiempo a preocuparse por cómo trata a su propio pueblo que por cómo los medios cubren sus abusos”, agregó.
A las 7:00 horas del domingo 1 de octubre, la estudiante Armita Geravand, de 16 años, se subió al tren de la línea 4 del metro, pero perdió el conocimiento debido a una baja de presión arterial. Actualmente, la adolescente está siendo tratada en un hospital de Teherán.
Los padres de Armita dijeron en una entrevista con IRNA que pidieron a los chismosos que oraran por su hija y no crearan el caos. Respecto a los detalles del accidente de su hija, su madre agregó: “Mi hija y sus amigas planeaban ir a la escuela en metro, y después de entrar a la estación, su presión arterial bajó y luego de perder el conocimiento, su cabeza golpeó el borde del carruaje.
“En esa situación sus amigos la bajaron del carruaje y a los pocos minutos Armita fue llevada al hospital”, enfatizó.
Agradeció al personal médico por sus esfuerzos para tratar la condición de Armita y dijo: “Han cooperado bien con nosotros en el tratamiento de mi hija”.
“Revisamos todos los videos del metro y nos demostró que fue solo un accidente”, explicó el padre de Armita.
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